Un jardín histórico
Creados en 1816 por iniciativa del Príncipe Honorato V, los Jardines Saint-Martin y Sainte-Barbe son los espacios verdes públicos más antiguos de Mónaco. Se acondicionaron para dar trabajo a los habitantes durante un periodo de hambruna. Instalados en terrenos abandonados en aquella época, albergaban inicialmente una flora típicamente mediterránea: pinares, encinas, mirtos, pistachos, etc. Con el tiempo, se introdujeron especies exóticas que enriquecieron la diversidad botánica del lugar. Hoy en día, los visitantes pueden pasear por la exuberante vegetación, que mezcla plantas locales con especies aclimatadas, en un ambiente relajante salpicado por un estanque y esculturas.
Un paseo entre arte y naturaleza
Los sinuosos senderos de los Jardines siguen las pronunciadas curvas del Rocher, ofreciendo a los paseantes unas vistas excepcionales del mar y del barrio de Fontvieille. Las zonas de descanso invitan al descanso y a la contemplación. En un recodo del camino, encontrará la estatua del Príncipe Alberto I, apodado el "Príncipe Navegante", realizada en bronce por el artista François Cogné en 1951 y situada en un promontorio que domina el Mediterráneo.
En el corazón de Monaco-Ville
Situados bajo la avenida Saint-Martin, en el barrio de Monaco-Ville, estos jardines de libre acceso son un refrescante descanso entre las visitas a los lugares y monumentos emblemáticos de la Roca, como el Museo Oceanográfico y la catedral de Notre-Dame-Immaculée, o después de asistir al cambio de guardia o visitar el Palacio del Príncipe, situado a pocos minutos a pie.
Información práctica
Entrada gratuita.
Accesible para PMR (el acceso para PMR se encuentra frente a la catedral o frente al Museo Oceanográfico. No obstante, tenga cuidado con algunas cuestas, que son un poco empinadas).