Jumping International de Montecarlo

Otro año más, el Jumping International de Montecarlo, al pie de las murallas del Palacio Principesco, promete grandes momentos de emoción deportiva.
La etapa monegasca del prestigioso circuito Longines Global Champions Tour, el campeonato mundial de Fórmula 1 en versión ecuestre, acoge a los mejores jinetes del mundo durante tres días de competiciones de salto de obstáculos, cuyo prestigio ya no necesita presentación, en el corazón del Port Hercule. Un escenario atípico e inesperado.

Los cascos a orillas del Mediterráneo

Construir un estadio ecuestre en el corazón del Port Hercule tiene algo único: traer toneladas de arena fibrada, transformar el puerto en establos y darle al conjunto este entorno lujoso propio del evento. Los caballos se alojan en el puerto: una imagen poco común es ver a estos campeones descansar entre las yates más hermosas del mundo entre dos pruebas.
Alrededor de la pista de arena donde se desarrolla la competición, las palcos acogen a laureados y grandes fortunas, que acuden a presenciar las pruebas deportivas de alto nivel.
En el lado del paddock de entrenamiento se encuentran las tiendas del Village des Exposants, donde, entre dos pruebas, los espectadores podrán pasear con la esperanza de cruzarse con los campeones de salto de obstáculos y admirar los caballos de cerca.

Una prestigiosa prueba

Solo los mejores jinetes y sus monturas están invitados a competir en el Principado.
Gracias a la calidad y la tecnicidad de sus pistas y sus equipamientos, el Jumping International de Montecarlo se ha convertido en un símbolo de excelencia y excepcionalidad para los jinetes y los espectadores de este concurso. Es el tercer evento deportivo del Principado, justo detrás del Masters de tenis y el Gran Premio de Fórmula 1.

Un espectáculo trepidante y una competición fuera de lo común

Al igual que el Gran Premio de Fórmula 1, la particularidad de esta cita mundial reside en lo estrecho de sus pistas. Compuestas por numerosos obstáculos, tienen la particularidad de ser muy cortas y sinuosas. Por  tanto, los competidores deben multiplicar por dos su dominio técnico para lograr el mejor tiempo y ganar el trofeo. No importa si es especialista o principiante, ¡el juego le de dejará sin aliento!
Durante los tres días, merece la pena acercarse hasta otra prestigiosa competición patrocinada por Charlotte Casiraghi: la Pro-Am Cup. Creada en 2010, esta prueba de relevos única en el mundo reúne en equipo a jinetes profesionales y aficionados en una emocionante contrarreloj.

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